1525-10-21
-Visita a los Partidos de La Mancha,
Ribera del Tajo, Campo de Montiel, Sierra de Segura y Murcia. Visita a Génave. (AHN. Guía de las OO.MM.
Mss. Santiago. Sig. 1080 C. Pag. 695-702).
/695/
Visitación de Xénave
Y después de lo
susodicho, veinte y un días del mes de octubre, año susodicho (21-10-1525), el dicho visitador
prosiguiendo la visitación llegó en el lugar de Xenave que es de la Encomienda
de Segura, donde se hizo presentación
del poder de Vuestra Majestad con presencia de Garci Hernández (¿), fraile de
la Orden, Cura de la dicha villa y Alonso García, alcalde, y Pedro Sánchez,
regidor y otros vecinos y buenos hombres del pueblo y por ellos fue obedecido
con el acatamiento debido. Luego fueron dados los pregones acostumbrados.
Iglesia
Se visitó la iglesia mayor
del dicho lugar que es de la vocación de Nuestra Señora, la cual es de una nave
y sus arcos atravesados y está bien reparada y de su maderamiento de pino y
tiene su sacristía y púlpito y hay una capilla que se dice de Alonso López que
está bien hecha; y tiene su tribuna y torre de campanas y portal delantero
bueno y bien obrado; y enmaderado de buena madera.
Santo Sacramento
Se visitó el Santísimo Sacramento, el cual se halló en un tabernáculo de yeso junto al altar con su cerradura. Y dentro en un altar pequeño, una arquilla cubierta de un velo y sus corporales y dentro una caja de plata redonda y dentro de ella el Santo Sacramento, limpia e decentemente.
Pila y olio
Luego
se visitó la pila del bautizar que está dentro de una red y las crismeras y
olio “santorun” y “oliun infirmorum”, lo cual se halló todo limpio y bien
tratado y libro de bautizados y se le hicieron las admoniciones acostumbradas al Cura.
Altares y aras
Visitaron las aras y los
altares y se hallaron bien ataviados y limpios y dos aras en ellos con sus
palias y corporales.
Ornamentos y plata
Una cruz de plata sobre madera muy buena con su manzana y cañón, bien obrada que dice que pesa diez marcos.
Una custodia buena y nueva que pesa más de cuatro marcos de plata de maçinería con su cruzica muy bien obrada y su luneta.
(línea velada)
Hay dos manillas de plata y seis flores de la cruz y unos corales y una cruzica chiquita de plata y una bolsilla en que está.
Una casulla de terciopelo negro con su cenefa y púrpuras.
Una capa de tafetán con su cenefa, Una casulla negra rota, tiene una /696/ cenefa buena para pasar y otra, una casulla con su recado de (…) azul, una cenefa de sasira (¿). Una capa de damasco morado con su cenefa.
Una manga de cruz buena de carmesí pelo bordada y con colores (¿).
Un frontal de raso amarillo y morado y frontaleras. Un frontal de guadamecí. Un vestimento de lienzo blanco con su recado. Una cortina. Un “veluntempli”
Acrecentado
Hay acrecentado una casulla de damasco amarillo con todo su recado.
Hay manteles y cierta ropilla vieja de la imagen.
Y hay otra ropa de que se mandará hacer almoneda. Y una sobrepelliz.
Libros
Un misal de la Orden nuevo y otro toledano, y un misto grande de
canturía. Un sacramental. Unas visperadas pequeñas. Un manual viejo.
Un cuaderno de la Visitación y
un libro de lamentaciones.
Unas “cinquistorias”. Dos cuerpos de oficiario santoral y dominical,
nuevos y buenos. Y otros libros viejos.
Campanas y
metal
Dos campanas
buenas grandes, una mayor y otra que se ha hecho de nuevo de otra; dos
esquilones; una rueda con doce campanillas; una campanilla de mano. Un acetre y
hierros de hostias; y dos lámparas, la una grande y la otra pequeña y dos
candeleros. Hay dos arcas y un cofre lambado (¿) y andas.
Posesiones
Tiene
la dicha iglesia su dezmero escusado conforme a los establecimientos.
Tiene
más el bacín y sepulturas; y un huerto linde Miguel Sánchez, viejo.
Una
haza en la Parrilla de cuatro fanegas linde Martín Sánchez de Moya.
Una
viña camino de Çalfaraz, linde Miguel Sánchez.
Una
viña linde Pascual García. Un herrenal en el arroyo la Vieja de una fanega,
linde herederos de Diego de Santacruz.
Otra
tierra en la hondonada las viñas, linde herederos de Martín García.
Otra
haza en la Cañada Herreros, linde de herederos de Martín Ruiz.
Una
tierra en la (línea velada)
Otras
dos hazas en los ríos, linde la una, haza de Avilés y de Hernán Martínez.
Otra
haza de cuatro fanegas en los Molinares, linde Fernando Sánchez, escribano.
Tiene
más, un montril (¿ mongil) de panes y un almaizar y una colcha nueva.
Una
sábana con cintas coloradas; una saya morada con barras de raso negro.
/697/
Una
cintilla negra; un cíngulo (¿) con cabos de hilos de oro; un tocado de mujer de
pellejo Ocho piezas de paramentos grandes y pequeño; todo lo cual se ha dado de
limosnas, y de ellas se ha de hacer almoneda para hacer una imagen de talla.
Cuenta del Mayordomo
Luego
se tomó cuenta al mayordomo de la dicha iglesia y se halló en el cargo Juan
Martínez, vecino del dicho lugar y parecía que aquel tiene el cargo tres años y
le fue tomada cuenta en el mes de agosto de mil quinientos y veinte y tres por
el Vicario de Villa Rodrigo y le fue hecho alcance y ahora dio la cuenta
siguiente:
Cargo
Se le hizo cargo al dicho Juan Martínez del
alcance que le fue hecho en la cuenta que le tomó el dicho Vicario y oficiales
que montó siete mil cuatrocientos y cincuenta y tres maravedíes.
VII U CCCC LIII (7.453.-).
Yten se le
hizo cargo que ha recibido de dones de la dicha cuenta que se le tomó en el
dicho año de veinte y tres hasta ahora del escusado y limosnas y vino y lana y
bacín y sepulturas, y de todo lo que ha recibido por la iglesia doce mil
setecientos y ocho maravedíes y medio.
XII U DCC
VIII (12.708.-).
Así que monta
el dicho cargo veinte mil ciento y sesenta y un maravedís y medio según
parecía.
XX U CLXI
(20.161.-).
Para lo cual
dio gastado el dicho mayordomo en hacer un portal de la iglesia y en cera y en
incienso y una sobrepelliz y otros reparos y cosas que ha hecho y gastado por
la iglesia con un postigo que abrió en una pared y ponerle puerta y en todo lo
que dio gastado diez y ocho mil y trescientos y cincuenta y nueve maravedíes y
medio.
XVIII U
CCCLIX (18.359.-).
Alcance
Así que es alcanzado el dicho mayordomo por
mil y ochocientos y dos maravedíes en dineros.
I U DCCC II (1.802.-).
Asimismo se
le hizo cargo y descargo del pan que recibió (línea velada) por quince fanegas y tres celemines de trigo; y una
fanega y nueve celemines de cebada y una
fanega y media de escaña.
Le queda más
a la dicha iglesia diez reales que se deben de la uva de este año de veinte y
cinco que no se ha cobrado /698/ y se le cargó y más tres reales de la de
Pascual Sánchez del olivo (¿) de una manda, y más cuatrocientos maravedíes de
una sepultura de la hija de Bartolomé Sánchez de lo cual no es llegado el plazo
y más setenta maravedíes debe de vino Martín Gil (¿), que son todos mil doce
maravedíes y de un pollo doce maravedíes, y más quedan por vender tres cabezas
de ganado de lanar de el escusado de este año de veinte y cinco, y el diezmo de
becerros y un potro de Esquivel que no se ha dezmado,
I U XXIIII
(1.024.-).
Que el dicho
Juan Martínez dio la cuenta jurada y fue condenado a que luego diese el dicho
alcance, pan y dineros y ganado a Miguel Sánchez, mayordomo nuevo que se le
hizo de la dicha iglesia. Testigos Juan González viejo y Miguel Sánchez y Pedro
Sánchez, vecinos del dicho lugar.
Otra cuenta
Asimismo se visitó una cuenta que fue tomada
por el Concejo del dicho lugar y por el Vicario de Villa Rodrigo a Juan Rodríguez
y fue mayordomo después de la visitación pasada el año de quinientos y diez y
seis y quinientos y diez y siete y diez y ocho y allende del alcance que le fue
hecho por el dicho Vicario pareció que no se le había pagado cierto pan y
dineros que había cobrado para la iglesia que es lo siguiente:
Cobró de
Gonzalo Gómez de una deuda de la iglesia dos mil y cuatrocientos y setenta y
cinco maravedíes, y no estaba asentado más de mil seiscientos treinta y siete
maravedíes, se le cargó ochocientos treinta y nueve.
U DCCC XXXIX
(839.-).
Yten de una
casa de la iglesia que se vendió a Antonio García por seis mil maravedíes, y
cobró los quinientos según pareció por su libro y mil y quinientos maravedíes
que cobró por él un regidor del pueblo, se le cargan cuatro mil maravedíes.
IIII U
(4.000.-).
Por el vino
de quinientos diez y ocho, ciento y cincuenta maravedíes y por nueve fanegas de
cebada y cinco y media de escaña, seiscientos veinte y nueve maravedíes; y por
seis fanegas de trigo, seiscientos doce; y por fanega y media de cebada, tres
reales, que es todo mil seiscientos y sesenta y tres maravedíes.
I U DCLXIII
(1.663.-).
Todo lo cual
recibió el dicho mayordomo nuevo de los susodichos y se le hizo cargo.
Ejecución
Que por los dichos maravedíes se hizo ejecución
al susodicho en dos bienes muy buenos y se pusieron en poder del dicho
mayordomo rematados.
Mandatos
Se mandó al Concejo, alcaldes y oficiales del
dicho lugar que se hagan suelos a la iglesia porque está des solada y que
apremien a los dueños de las sepulturas que paguen cada uno el solar de la suya
y le saquen por ello prendas y se vendan por lo susodicho; y lo hagan de yeso y
su suelo parejo porque quede firme, lo cual haga de aquí al día de San Miguel
del año de quinientos veinte y seis, so pena de veinte ducados para redención
de cautivos; se notifica a los alcaldes /699/
Yten que el
Concejo y Cura puedan tomar y tomen las cuentas al mayordomo de la iglesia y de
las ermitas; y que si el Vicario quisiere entender en ello no lleve derechos
salvo una comida mientras tomare la cuenta a él y a la persona que con él
viniere a ello.
Yten que el
altar mayor que está demasiadamente alto que se abaje una grada o dos según
mejor pareciere al cura y alcaldes del dicho lugar.
Yten que la
ropa que tiene la iglesia que la venda porque se come de polilla y que se haga
almoneda de ello para la iglesia de todas las piezas de lana y de todo lo demás
que pareciere al Cura y oficiales del Concejo. Y que unas alfajías que son de
la iglesia que están en la puente de la torre que las quite y las lleve a la
iglesia y que ninguno se lo defienda, so pena de cuatro ducados para redención
de cautivos.
Santa María del Campo
Se visitó una ermita que se dice Santa María
del Campo, que es fuera del dicho lugar; la cual es una ermita pobre y de
edificio viejo, y los arcos de la ermita están caídos y puesto pilares de
piedra que los sustentan; y se halló por mayordomo Gonzalo Martínez, vecino de
Xenave, el viejo; el cual tiene cierta ropilla y manteles por su inventario.
Posesiones
Un parral en Villa Rodrigo, el cual se manda
vender para su reparo.
Una haza de tierra en los Royos
de tres fanegas, linde Juan García Coronado.
Un herrerial en Royo la Vieja,
linde la de Juan Esteban.
Un haza de diez fanegas, linde
Gonzalo Gómez y Juan Romero, bajo la ermita
Otro de cinco fanegas a las
espaldas de la ermita, linde Gonzalo Gómez.
Otra haza de cuatro fanegas,
linde Juan Gómez y Andrés Serrano.
Otras dos fanegas en las
Fuentes Someras, linde herederos de Alonso López.
Otra de dos fanegas que
traviesa el camino de la ermita.
Cuenta del mayordomo
Luego se tomó cuenta al mayordomo de la dicha
ermita y se halló que después que tiene el cargo que lo dejó (línea velada) se le hizo cargo que ha
recibido por la dicha ermita once fanegas y media de trigo y treinta
maravedíes; y dio gastado quinientos y setenta y siete maravedíes en reparos de
la dicha ermita y se le desabecieron (¿) por ellos cinco fanegas de trigo, así
que es alcanzado por seis fanegas y media de trigo; y dio la cuenta jurada. Testigos
Pedro Sánchez, regidor y Rodrigo Tinoco, y se quedó en el dicho cargo y se le
mandó que el dicho trigo lo venda de aquí al /700/ mes de mayo y los maravedíes
de su valor los gaste en su reparo de la dicha ermita y cobre sus rentas de las
heredades y que venda un parral que tiene la ermita en Villa Rodrigo con
parecer del Vicario y los gaste en el reparo.
Beneficio curado
Se visitó el beneficio curado
de la iglesia del dicho lugar, en el cual hallaron a Garci Hernández, freile de
la Orden por presentación de los Reyes católicos, su fecha en diez y nueve de
octubre de mil quinientos y cinco años y por colación del arzobispo de Toledo,
y se halló idóneo. Tiene el dicho beneficio el pie de altar las primicias que
le da el comendador que podrá valer hasta quince mil maravedíes.
San Sebastián
Se visitó una ermita de San
Sebastián que es en los ejidos del dicho lugar, la cual es una ermita pobre y
está bien reparada; y tiene comenzada una capilla de cantería y están en buen
compás las paredes casi en lo alto que han de estar.
Cuenta del mayordomo
Se halló por mayordomo
Cristóbal del Moral, al cual se le hizo cargo de lo que recibió del alcance que
fue hecho a Garci Muñoz mayordomo su antecesor y todo lo que ha recibido para
la dicha ermita desde que tiene el dicho cargo hasta hoy y montó todo el dicho
cargo con el dicho alcance mil ciento ochenta y cinco maravedíes, dio gastado
en cera y reparos de la dicha ermita y en aceite mil ciento y cuatro
maravedíes, así es alcanzado por ochenta y un maravedíes, y dio la cuenta
jurada; testigos Juan Rodríguez y Pedro Sánchez, vecinos del dicho lugar; y se
quedó en el dicho cargo y se le mandó que los maravedíes del dicho alcance y lo
que más cobrare para la ermita lo gaste en su reparo en lo que más necesario
fuere.
LXXXI (81.-).
San Cristóbal
Se visitó una ermita de San
Cristóbal que es en el ejido del dicho lugar; es una ermita bien hecha y de una
nave toda de cantería y buen tejado nuevo y de sus arcos atravesados y
enlazados; un cuerpo a buena altura y ciertas imágenes de buena pintura.
Cuenta del mayordomo
Se halló por mayordomo Miguel
López, vecino del dicho lugar, al cual se le hizo cargo lo que ha recibido de (línea velada) y tres y con el alcance
que recibió de Juan Guerrero y más cuatro reales que cobró de Juan Rubio,
alcalde, y siete reales que cobró de Miguel Sánchez, carnicero, de un chivato,
y de todo lo que recibió para la ermita que montó en ello dos mil seiscientos y
cincuenta y nueve maravedíes; y dio de gasto en reparos de la ermita y de
pinturas del santo y con un real que volvió a Miguel Sánchez, y con otro /701/
que dio al Vicario de Villa Rodrigo, y en todo lo que dio gastado dos mil y
trescientos y cuarenta y siete maravedíes; así que es alcanzado el dicho
mayordomo por trescientos y doce maravedíes. Alcance:
U CCCXII (312.-).
Mandatos
Se le mandó que los dichos
maravedíes y lo que más cobrare para la dicha ermita los gaste en hacer realçer
unas esquinas de la ermita que están combadas, y cerrar un aguilón que está por
cerrar, y hoy mismo blanquear una nave de la ermita como está la otra.
Santa María Magdalena
Se visitó una ermita de la
Magdalena que está en las eras del dicho lugar, y es ermita pobre; y se halló
por mayordomo Ruy Pérez, vecino del dicho lugar y se le tomó cuenta de lo que
ha cobrado de ella; y desabecido lo gastado en aceite y tejas fue alcanzado por
trece reales y se quedó en el cargo y lo juró y juró la cuenta; y se le mandó
que los dichos maravedíes y lo que más cobrare los gaste en cerrar la ermita de
su red o tabique, y que no esté abierta como está, y la tenga reparada.
U CCCCXLII (13x34 = 442.-)
Hospital
Se visitó un hospital del dicho
lugar; y es una casa pobre y sin renta y no se halló en él morador ninguno; se
mandó al Concejo del dicho lugar que pongan una persona, en el que acojan a los
pobres que vienen y porque el dicho hospital no se acabe de caer que lo reparen
en lo que reparo hubiere menester con apercibimiento que se le hizo que si se
cayere se le hará hacer de nuevo al Concejo del dicho lugar y asimismo se le
mandó que propongan mayordomo que cobre sus limosnas y demandar en la iglesia a
cualquier personas algunas limosnas para el dicho hospital.
Torre
Se visitó una torre que está en
el dicho lugar, que es de la dicha Encomienda, la cual se halló con cerradura y
llave; y tiene sus bóvedas muy buenas y su escalera y sin falsa cubierta, todo
muy bien reparado, que no tiene necesidad de presente de reparo ninguno; al pie
y al derredor de la dicha torre está un albacara con su cerca de cal y canto y
pretiles y almenas; lo cual es a cargo del dicho Concejo del dicho lugar de repararse,
y se halló que las paredes de los dichos adarves de la dicha albacara están en
partes socavados y aportillados y un agujero en una parte, lo cual se mandó al
Concejo y alcaldes y regidores de el dicho lugar que lo reparen y hagan dentro
de un año primero siguiente, so pena de diez ducados para redención de
cautivos.
Hay en la dicha albacara mucha
piedra de cantería muy buena, labrada que se había librado para hacer una casa
de bastimento para la Encomienda; y no está comenzada salvo labrada la piedra y
dicen que ha costado la dicha cantería veinte y cinco mil maravedíes; se le
mandó que no tomen de ella piedra alguna, ni la consientan tomar so la dicha
pena y más el pagar la dicha piedra.
/702/
Horno de poya
Se visitó una casa de horno de
poya que está en el dicho lugar, que es de la Encomienda de Segura; el cual
está repartido en dos cuerpos, que en el un cuerpo está el horno y poyos y
aderezo de que se sirve el pueblo. Y el otro cuerpo no está acabado de hacer. Y
dicen que se ha de hacer otro horno en el otro cuerpo. Esta casa se ha hecho de
la “medianata”. Y están las paredes de cantería y no está cubierto mas de el un
cuerpo según dicho es por base (¿) en los mandatos, lo que se ha de hacer en
él.
Vecinos y cuantiosos
Dieron los oficiales por copia
jurada que hay en el dicho lugar ciento y treinta vecinos y que de ellos son
cuantiosos los siguientes:
Alonso López
Francisco Martínez, el rico
Francisco de Esquivel
Gonzalo García
Juan Morcillo de Siles
A los cuales y cada uno de
ellos se le notificó que tengan armas y caballos dentro de cuatro meses, so las
penas de los establecimientos.
Gasto de visitadores
Estuvo el dicho visitador en el
dicho lugar dos días y medio, hizo de toda costa quinientos veinte y un
maravedíes y medio; pagó el Comendador la mitad y el pueblo la otra mitad. Se
dio mandamiento de repartimiento.
COMENTARIO: El 21 de
octubre de 1525 el visitador santiaguistas, el
bachiller Pedro González, cura de Azuaga, llegó a Génave que era un
lugar de la Encomienda de Segura (El otro visitador estaba enfermo). Presentó
el mandamiento real de poder a Garci Hernández, cura, Alonso García, alcalde
ordinario, Pedro Sánchez, regidor y en presencia de otros muchos hombres buenos
del pueblo, que lo obedecieron y estaban prestos a cumplirlo.
A continuación se
dieron los pregones acostumbrados para que cualquier persona que tuviera queja
o agravios del Comendador de Segura don Pedro Portocarrero o de sus criados,
que se presentasen ante él, los oirían y haría justicia.
Luego visitaron la
iglesia parroquial de Nuestra Señora, donde estaba de cura Garci Hernández,
freile santiaguista que ejercía su cargo desde 1505.
La iglesia estaba muy
bien reparada. Era de una nave con arcos atravesados y techumbre de madera de
pino. Tenía sacristía, púlpito, una buena capilla que se dice de Alonso López,
un coro o tribuna, un campanario, ya terminado, con sus campanas y un buen
portal en la entrada de buena madera que acababa de hacer el mayordomo. Pero la
iglesia estaba sin suelos y los visitadores mandan al Concejo que la enyesen
toda pareja y que las sepulturas que hay en su interior se cobren a sus
propietarios su enyesado.
Tenían cierta ropa
vieja para vestir la imagen de Nuestra Señora. Los visitadores mandan poner en
almoneda ciertas limosnas de sus vecinos para comprar una nueva imagen de
talla. La iglesia ya tenía libro de bautismos.
Encontraron por
mayordomo de la iglesia al vecino Juan Martínez que llevaba tres años en el
cargo. En 1523 le tomó cuenta el Vicario de Villa Rodrigo, Diego de Avilés y
los oficiales del Concejo de Génave. Durante el cargo de este mayordomo se le
hizo una puerta-postigo a la iglesia y el porche de madera de la entrada.
Los visitadores
tomaron todas las cuentas pendientes de la iglesia y nombraron a Miguel Sánchez
como nuevo mayordomo de la iglesia de Génave. También mandaron al Cura y al
Concejo que le tomen las cuentas anuales sin necesidad de la presencia del
Vicario de Villarrodrigo.
Se visitaron las ermitas del lugar: Santa María del Campo, San Sebastián,
San Cristóbal y Santa María Magdalena.
- Santa María del Campo: Fuera del lugar. El edificio es muy viejo y en
ruinas, tiene posesiones y con ellas tendrán que reedificar la ermita.
Mayordomo Gonzalo Martínez. En las demás visitas nos dicen que la ermita estaba
entre media y una legua de Génave, es decir alrededor de 5 kilómetros y a unos
100-200 metros del Camino Real que baja del Collado de los Yesos por Las
Mangadas y Santa María donde hace término con Villarrodrigo. En concreto en el
lugar que hoy conocemos como Paraje o caserío de Santa María.
- San Sebastián. Está en los ejidos. Bien reparada se le construye una
capilla de cantería. Mayordomo Cristóbal del Moral. Mayordomo anterior García
Muñoz. Esta ermita ya existía en 1495 y continuará existiendo en visitas
posteriores.
- San Cristóbal: Está en el ejido, en un cerro junto al pueblo. En 1498
estaba en ruinas. Ahora en 1525 está recién reconstruida. Mayordomo Miguel
López
- Santa María Magdalena: Está en las eras. Esta ermita solo aparece en
esta Visita. Mayordomo Ruy Pérez.
El visitador santiaguista después de visitar la iglesia y las ermitas fue
a visitar el hospital, las fortificaciones y el horno de pan.
- Hospital: En
esta época, a finales del siglo XV y principios del XVI, se fundan los
Hospitales en los distintos lugares de la Encomienda de Segura, a instancias de
los visitadores santiaguistas. Los Hospitales proporcionaban alojamiento y
comida a viajeros sin recursos, peregrinos, clero de visita, o simplemente a
los pobres y vagabundos del lugar. Su construcción y mantenimiento corrían a
cargo del Concejo del lugar y se otorgaba a los Concejos el nombramiento de
mayordomos.
El hospital de Génave
no tenía huéspedes porque necesitaba reparaciones y no estaba equipado. Los
visitadores mandan al Concejo que lo reparen y nombren un mayordomo para
encargarse de él y pedir limosnas a los vecinos. Génave aún hoy mantiene el
recuerdo de esta institución con el nombre de una de sus calles.
- Fortificaciones: Estas instalaciones defensivas de las distintas villas
y lugares de la Encomienda de Segura eran muy parecidas y construidas en la
primera mitad del siglo XII, por los andalusíes (jerarquía hispana convertida
al islán). Constaban de una torre central y unas murallas (cortijo) que en
parte rodeaban la torre, dejando en su interior un patio libre o albacara. En
caso de peligro, las mercancías y animales se resguardaban en el patio interior
del cortijo o albacara y las personas en el interior de la torre donde tenían
un pozo para su suministro en caso de asedio.
En Génave la torre o torreón estaba a cargo de la Encomienda que la tenía
muy bien reparada y nombraba y pagaba a sus alcaides. El reparo de la cerca o
murallas (cortijo) era a cargo del Concejo, al que los visitadores mandan
reparar una gran cantidad de desperfectos que tenía.
En el momento de la visita, la albacara está llena de piedras talladas
por los canteros para la construcción en sus inmediaciones de la Casa de
Bastimentos por parte de la Encomienda (Casa de la Orden, de la Encomienda o de
la Tercia).
- Horno de pan: Los hornos de pan, “poyas” o “hornos de poyas” eran
unidades productivas monopolio santiaguista, controlado por la Encomienda de
Segura que se encargaba de su construcción y reparaciones y cobraba por su
utilización por parte de los vecinos, normalmente mediante arriendo.
En visitas anteriores los visitadores comprobaron que el horno se había
quedado pequeño por el aumento de población y mandaron que se construyera un
segundo cuerpo de horno que en este momento estaba a medio construir. La
Encomienda lo hacía con el dinero de la “medianata” (1/6 de los beneficios que
la Encomienda obtenía en Génave).
Génave tenía 130
vecinos o familias (unos 650 habitantes) y 5 de ellos eran cuantiosos, con sus
armas y caballo dispuestos para la guerra.
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